lunes, 26 de enero de 2009

La Omnipotencia del Hombre

Caminaba con los ojos cerrados, no los necesitaba para un acto tan habitual, mientras mi mente repetía aquellas palabras que aprendí en la Universidad de los Aniñados, eran tres créditos de el Ser II suponía ser filosofía oriental, sin embargo por descarte la vida me llevo a los cursos que nadie había tomado en la Universidad, por sus afamados profesores, uno de ellos candidato a premio nobel y el otro un ser extraño que decía hablar 15 idiomas, la verdad es que de todas sus clases las cuales reprobé solo me había quedado rondando en la mente un Mantra, que él nos enseño y decía que simplemente no significaban nada, eran palabras cósmicas que producían cierto efecto en el universo, a la final la clase la reprobé, no era su santo de devoción por usar piercings y cada vez llevaba la argolla más grande y enamoraba a las compañeras en su complot.

Y ese día recitaba: "Om Mani Padme Hung", si con los ojos cerrados, todo era más claro, vi llover sobre mi y permanecía dichoso, pero había superado a mi maestro, al fin había despejado mi curiosidad sobre que significaban en realidad las poderosas palabras que desde ese día me acompañaron.





El XIV Dalai Lama escribe así sobre el mantra:

"Es muy bueno recitar el mantra Om mani padme hum, pero mientras lo haces, debes pensar en su significado, porque el significado de sus seis sílabas es grande y extenso... La primera, Om [...] simboliza el cuerpo, habla y mente impura del practicante; también simbolizan el cuerpo, habla y menta pura y exaltada de un Buddha[...]"
"El camino lo indican las próximas cuatro sílabas. Mani, que significa "joya", simboliza los factores del método -- la intención altruista de lograr la claridad de mente, compasión y amor.[...]"
"Las dos sílabas, padme, que significan "loto", simbolizan la sabiduría[...]"
"La pureza debe ser lograda por la unidad invisible del método y la sabiduría, simbolizada por la sílaba final hum, la cual indica la indivisibilidad[...]"
"De esa manera las seis sílabas, om mani padme hum, significan que en la dependencia de la práctica de un camino que es la unión indivisible del método y la sabiduría, tú puedes transformar tu cuerpo, habla y menta impura al cuerpo, habla y mente pura y exaltada de un Buddha[...]"



Yendo más allá y revisando nuevamente el libro de mi maestra, descubrí que en realidad eso significaba, la joya en el loto, y que esotericamente se traduciría al "Dios que vive en mi", desde ese momento soy poderoso, llevo a Dios conmigo y al Diablo que son los mismos, la tecnología, las religiones hicieron que me pregunte más de un millón de veces, lo que de niño yo ya lo tenía muy claro y es que el mundo esta hecho de energía y nosotros somos semidioses, en el camino a ser Dioses, y la unica encarnación con la que contamos es la actual, para que esperar otra humillación, o dejarlo todo, en cualquier ámbito de la vida uno lo puede lograr y eso me demostró el maestro Kingman.



Al detenerse frente a este cuadro uno solo puede imaginarse a Dios Pintándolo.



Recomiendo visitar a 100 metros del parque de San Rafael, la Casa de Kingman quien personalmente los recibirá bebiendo cafe, en un microcosmos donde habitaba uno de los ecuatorianos más especiales que he conocido.



Los Secretos ya no Son Más Secretos



4 comentarios:

Silvana Tapia dijo...

Wow. Estas volviendo a brillar.

Nando dijo...

Ser y Cosmos II....sabia que teniamos un oscuro pasado en comun bwajajaja

Juandiego dijo...

...Bodhisattva under construction...

Juandiego dijo...

Ah si! Acabo de recordar que lo de Om mani padme hum realmente es un invento de The Beatles en su canción Across the Universe!!

Claro, estoy bromeando. Pero sí es cierto que millares de hippies lo balbucearon en su momento por su culpa.